• Va cayendo el día. Una gran paz llena las pobres mentes, cansadas del trabajo diario, y sus pensamientos toman ya los colores tiernos o indecisos del crepúsculo.

    Sin embargo, desde la cima de la montaña llega hasta mi balcón, a través de las nubes transparentes del atardecer, un gran aullido, compuesto de una multitud de gritos discordes que el espacio transforma en lúgubre armonía,...

  • ¿Qué dirás esta noche, pobre alma solitaria,
    Qué dirás, corazón mío, corazón otrora marchito,
    A la hermosísima, a la buenísima, a la carísima,
    Cuya divina mirada de pronto te ha reflorecido?

    —Emplearemos nuestro orgullo entonando sus loas,
    Nada vale la dulzura de su autoridad;
    Su carne espiritual tiene el perfume de los Ángeles,
    Y su mirada nos...

  • Una noche que estaba junto a una horrible judía,
    Como a la vera de un cadáver, un cadáver tendido,
    Me dediqué a pensar, cerca de aquel cuerpo vendido,
    En la triste belleza de la que mi deseo se priva.

    Me representé su majestad nativa,
    Su mirada de vigor y de gracias armada,
    Sus cabellos que le forman un casco perfumado,
    Y cuyo recuerdo para el amor me...