• Plaza de Armas, plaza de musicales nidos,
    frente a frente del rudo y enano soportal;
    plaza en que se confunden un obstinado aroma
    lírico y una cierta prosa municipal;
    plaza frente a la cárcel lóbrega y frente al lúcido
    hogar en que nacieron y murieron los míos;
    he aquí que te interroga un discípulo, fiel
    a tus fuentes cantantes y tus prados umbríos....

  • Árboles desnudos
    corren una carrera
    por el rectángulo de la plaza.
    En sus epilépticos esqueletos
    de volcadas sombrillas
    se asientan,
    en bandada compacta,
    los amarillos
    focos luminosos.

    Bancos inhospitalarios,
    húmedos
    expulsan de su borde
    a los emigrantes soñolientos.
    Oyendo fáciles arengas ciudadanas,
    un...