• ¡Tu belleza mirífica no asoma
    y en éxtasis escucho tu voz clara,
    que llega del jardín cual un aroma,
    pero cual un aroma que cantara!

    ¡Endulzas con tu acento un mar de acíbar
    y en éxtasis escucho tu voz clara,
    que viene de un amor, cual un almíbar,
    pero cual un almíbar que cantara!

  • Blanca como un cirio,
    pura como un lirio,
    la Virgen divina
    al templo camina,
    llevando en sus brazos cual rayo de luz
    al niño Jesús.
    Cuando Simeón
    ve a Cristo en Sión
    le toma y le mira,
    y canta y suspira.
    María: ¡qué espada de pena y dolor
    herirá tu amor!
    La Virgen María,
    después de aquel día,
    miraba a Jesús,...

  • Cultivo una rosa blanca,
    en julio como en enero,
    para el amigo sincero
    que me da su mano franca.

    Y para el cruel que me arranca
    el corazón con que vivo,
    cardo ni ortiga cultivo:
    cultivo una rosa blanca.

  • Bajo la calma del sueño,
    calma lunar de luminosa seda,
    la noche
    como si fuera
    el blanco cuerpo del silencio,
    dulcemente en la inmensidad se acuesta.
    Y desata
    su cabellera,
    en prodigioso follaje de alamedas.

    Nada vive sino el ojo
    del reloj en la torre tétrica,
    profundizando inútilmente el infinito
    como un agujero abierto...

  • Mis ojos miraban en hora de ensueños
    la página blanca.

     Y vino el desfile de ensueños y sombras.
    Y fueron mujeres de rostros de estatua,
    Mujeres de rostros de estatuas de mármol,
    ¡Tan tristes, tan dulces, tan suaves, tan pálidas!

    ...

  • Or, étant à Burgos, en sa chambre royale,
    Don Pedro fait mander Juan de Hinestrosa :
    — Ami Juan Fernandez, dit le Roi, venez çà.
    J’ai souci d’un cœur ferme et d’une foi loyale.

    Quand mes frères bâtards, m’assaillant à l’envi,
    Saccageaient...