• Las cosas viejas, tristes, desteñidas,
    sin voz y sin color, saben secretos
    de las épocas muertas, de las vidas
    que ya nadie conserva en la memoria,
    y a veces a los hombres, cuando inquietos
    las miran y las palpan, con extrañas
    voces de agonizante, dicen, paso,
    casi al oído, alguna rara historia
    que tiene oscuridad de telarañas,
    son de laúd...