EL MÉDICO CAZADOR
Un doctor muy afanado,
que jamás cazado había,
salió una vez, invitado,
a una alegre cacería.
Con cara muy lastimera,
confesó el hombre ser lego,
diciendo: –«Es la vez primera
que cojo un arma de fuego.
Como mi impericia noto,
me vais a tener en vilo.»
Y dijo el dueño del coto:
–«Doctor, esté...