• El recio astur, que se reputa
    Claro y puro y tenaz como un diamante;
    Y ella una montañesa, -diminuta
    Como todo primor-, suelta y picante.

    Y en una quiebra, convertida en huerto,
    Habitan, por azares, un casucho,
    Con un mozo andaluz, guapo, despierto,
    Y en corromper a las labriegas ducho.

    El marido es feliz. Tiene por Norte
    El propio...