• El orgulloso roble cierto día
    a la flexible caña así decía:
    ¡cuán injusto contigo me parece
    el padre de los dioses! ¡Pobre arbusto!
    Un régulo ligero te estremece,
    y te dobla a su gusto.
    Al impulso de Céfiro impotente
    inclinas sin defensa humilde frente:
    yo, no sólo detengo sin trabajo
    del sol molestos rayos, mas el viento
    ...