• Ya próspera lució sobre tu frente
    La corona nupcial, mi dulce amiga;
    Del Hacedor la mano omnipotente
    Tu venturosa union grata bendiga.

    ¡Oh! bendígala, sí: que sea eterno
    El amor noble y puro que atesora
    Ese esposo feliz, á quien tu tierno
    Y entusiasmado corazon adora.

    ¡Bendígala el Señor! Que resplandezca
    La dicha para tí: que la...

  • ¿Por qué volvéis a la memoria mía?,
    tristes recuerdos del placer perdido,
    a aumentar la ansiedad y la agonía
    de este desierto corazón herido?
    ¡Ay!, que de aquellas horas de alegría
    le quedó al corazón sólo un gemido,
    y el llanto que al dolor los ojos niegan
    lágrimas son de hiel que el alma anegan.

    ¿Dónde volaron, ¡ay!, aquellas horas
    de...

  • Con voladora pluma que no cesa,
    y ardiente estilo que las almas doma,
    la divina Teresa
    los conceptos altísimos expresa
    que le dicta la célica Paloma.
    Y sobre los sublimes inflamados
    renglones, suspendidos tras la silla,
    dos ángeles callados
    inclínanse curiosos a ambos lados,
    leyendo con placer y maravilla.
    Y, cual de aplauso y de...