Cuando sobre el pecho inclinas
La melancólica frente,
Una azucena tronchada
Me pareces.
Porque al darte la pureza
De que es símbolo celeste.
Como á ella, te hizo Dios
De oro y nieve.
Cuando sobre el pecho inclinas
La melancólica frente,
Una azucena tronchada
Me pareces.
Porque al darte la pureza
De que es símbolo celeste.
Como á ella, te hizo Dios
De oro y nieve.
Las ropas desceñidas,
desnudas las espadas,
en el dintel de oro de la puerta
dos ángeles velaban.
Me aproximé a los hierros
que defienden la entrada,
y de las dobles rejas en el fondo
la vi confusa y blanca.
La vi como la imagen
que en un...
Es un sueño la vida,
pero un sueño febril que dura un punto;
Cuando de él se despierta,
se ve que todo es vanidad y humo...
¡Ojalá fuera un sueño
muy largo y muy profundo,
un sueño que durara hasta la muerte!...
Yo soñaría con mi amor y el tuyo.
[...
Los invisibles átomos del aire
En derredor palpitan y se inflaman;
El cielo se deshace en rayos de oro;
La tierra se estremece alborozada;
Oigo flotando en olas de armonía
Rumor de besos y batir de alas;
Mis párpados se cierran... ¿Qué sucede?
— ¡Es el...
XXVI.
Voy contra mi interés al confesarlo;
Pero yo, amada mía,
Pienso, cual tú, que una oda sólo es buena
De un billete del Banco al dorso escrita.
No faltará algún necio que al oirlo
Se haga cruces y diga:
« Mujer al fin del siglo diez y nueve,
...
Cuando me lo contaron sentí el frío
de una hoja de acero en las entrañas,
me apoyé contra el muro, y un instante
la conciencia perdí de donde estaba.
Cayó sobre mi espíritu la noche,
en ira y en piedad se anegó el alma,
¡Y entonces comprendí por qué se llora...