Aparta de tus ojos la nube perfumada

Aparta de tus ojos la nube perfumada que el resplandor nos vela que tu semblante da, y tiéndenos, María, tu maternal mirada, donde la paz, la vida y el páramo está. Tú, bálsamo de mirra; Tú, cáliz de pureza; Tú, flor de paraíso y de los astros luz, escudo sé y amparo de la mortal flaqueza por la Divina Sangre del que murió en la Cruz. Tú eres, oh María!, un faro de esperanza que brilla de la vida junto al revuelto mar, y hacia tu luz bendita desfallecido avanza el náufrago que anhela en el Edén tocar. Impela, oh Madre augusta!, tu soplo soberano la destrozada vela de mi infeliz batel; enséñale su rumbo con compasiva mano, no dejes que se pierda mi corazón en él.

Collection: 
1837

More from Poet

  • Mi nombre fué don Enrique,
    rey de la fermosa España.
    Todo ombre verdat publique
    sin lisonja por fasaña.
    Pobre andando en tierra estraña
    conquistó tierras e. gentes.
    Agora parad bien mientes
    quel yago tan sin compaña
    so esta tumba tamaña.

    Con...

  • Episodio de la mía
    es la historia de una rosa,
    tan punzante como hermosa;
    una Rosa a quien yo amé.
    En mi huerto se abrió un día;
    de mi huerto la arrancaron,
    a la corte la llevaron,
    y tras ella mi alma fué.

    De una reina al pie del trono
    la...

  • Vivia en cierto lugar
    De la Estremadura un juez
    De ir llegando á la vejez
    Con grandísimo pesar.

    Era el tal un hombre obeso,
    De gran nariz, buen color,
    Formidable bebedor...
    Hombre en fin de mucho seso.

    Hombre á quien nunca ablandaron
    Las...

  • ¿Qué quieren esas nubes que con furor se agrupan
    del aire trasparente por la región azul?
    ¿Qué quieren cuando el paso de su vacío ocupan
    del cenit suspendiendo su tenebroso tul?

    ¿Qué instinto las arrastra? ¿Qué esencia las mantiene?
    ¿Con qué secreto impulso por el...

  • ¿Que se hicieron las auras deliciosas
    Que henchidas de perfume se perdian
    Entre los lirios y las frescas rosas
    Que el huerto ameno en derredor ceñian?
    Las brisas del otoño revoltosas
    En rápido tropel las impelian,
    Y ahogaron la estacion de los amores
    ...