• ¿Con qué culpa tan grave,

    sueño blando y suave,

    pude en largo destierro merecerte

    que se aparte de mí tu olvido manso?

    Pues no te busco yo por ser descanso,

    sino por muda imagen de la muerte.

    Cuidados veladores

    hacen inobedientes mis dos ojos

    a la ley de las horas;

    no han podido vencer a mis dolores

    ...