Aquí yace Mosén Diego, A Santo Antón tan vecino Que huyendo de su cochino Vino a parar en su fuego.
Cuando duerme una madre junto al niño duerme el niño dos veces; cuando duermo soñando en tu cariño mi eterno ensueño meces.
Tu eterna imagen llevo de conducho para el viaje postrero; desde que en ti nací, una voz escucho que afirma lo que espero.
Quien así quiso y así fue querido nació para la vida; sólo pierde la vida su sentido...
Una anemia de lirios otoñales se deshojaba en la amplitud marina y la vibrátil onda cantarina recitaba exquisitos madrigales.
Y era que en un arpegio de cristales elogiaba tus gracias de Infantina y tu perfil de emperatriz latina nimbado de fulgores ideales.
De pronto se borraron los confines; un eco de lejanos burcelines rasgó los...