• Muchachas, muchachos,
    a la rueda rueda
    que en mi pecho tengo
    toda la música de la tarde
    y una alegría azul, que tiñe mis pupilas.

    Muchachas, muchachos,
    a la rueda rueda.
    Que vuestra sea la calle
    y toda la vereda.

    Niña mía, si estás triste
    te bajaré una estrella
    y a la rueda rueda
    tú jugarás con ella.

    Muchachas,...

  • El pájaro de lujo ha mudado de estrella
    Aparejad bajo la tempestad de las lágrimas
    Vuestro ataúd a vela
    Donde se aleja el instrumento del encanto

    En las vegetaciones de los recuerdos
    Las horas en torno de nosotros hacen sus viajes

    Va rápido
              Va rápido impulsado por los suspiros
    El mar está cargado de naufragios
    Y yo he alfombrado...

  • Por el jardín de primavera
    yerra una brisa suave...
    (...Era su rubia cabellera
    como el ala de un ave
    que fuese una quimera...)

    Se han deshojado los rosales
    mustios y fatigados
    (...Oh sus manos liliales
    cuyos dedos cansados
    deshojan los males...)

     * * *

    Y dijeros las hadas: "Tus dorados cabellos
    serán aúreo manojo del...

  • Un día nació en su alma el deseo de modelar la estatua del «Placer que dura un instante». Y marchó por el mundo para buscar el bronce, pues sólo podía ver sus obras en bronce.

    Pero el bronce del mundo entero había desaparecido y en ninguna parte de la tierra podía encontrarse, como no fuese el bronce de la estatua del «Dolor que se sufre toda la vida».

    Y era él mismo con sus...

  • Cuando Narciso murió, el río de sus delicias se transformó de una copa de agua dulce en una copa de lágrimas saladas, y las Oréades vinieron llorando por los bosques a cantar junto al río y a consolarle.

    Y cuando vieron que el río habíase convertido de copa de agua dulce en copa de lágrimas saladas deshicieron los bucles verdes en sus cabelleras. Y gritaban al río y le decían:

    -...

  • Era de noche y estuvo Él solo. Y vio desde lejos las murallas de una vasta ciudad y se acercó a ella.

    Y cuando estuvo muy cerca oyó el jadeo del placer, la risa de la alegría y el sonido penetrante de numerosos laúdes. Y llamó, y uno de los guardianes de las puertas le abrió.

    Y contempló una casa construida con mármol y que tenía unas bellas columnatas de igual materia en su...

  • Y cuando las tinieblas cayeron sobre la tierra, José de Arimatea, después de haber encendido una antorcha de madera resinosa, descendió desde la colina al valle, porque tenía que hacer en su casa.

    Y arrodillándose sobre los pedernales del Valle de la Desolación, vio a un joven desnudo, que lloraba.

    Sus cabellos eran de color de miel y su cuerpo como una flor blanca; pero las...

  • Desde su infancia le habían inculcado, como a cualquiera, el perfecto conocimiento de Dios, y hasta cuando era niño, muchos santos así como ciertas santas mujeres que vivían en la libre ciudad, donde él nació, habíanse quedado atónitos ante sus respuestas graves y sabias.

    Y cuando sus padres le entregaron el traje y el anillo de la edad viril, les abrazó, abandonándoles para ir a correr...

  • Y el silencio reinaba en la Casa del Juicio, y el hombre compareció desnudo ante Dios.

    Y Dios abrió el libro de la vida del hombre.

    Y Dios dijo al hombre:

    -Tu vida ha sido mala y te has mostrado siempre cruel con los que necesitaban socorro y con los que carecían de apoyo. Has sido hosco y duro de corazón. Te llamó el pobre y tú no le oíste, y cerraste tus oídos al grito...

  • - 1 -
    Mañana de plomo
    solloza la hora su pena;
    llueve.
    También llora mi alma
    su melancolía.

    Mañana de plomo,
    corazón aterido;
    tristeza
    me llega muy hondo
    el gris del paisaje.

    Cierzo de invierno.
    El dolor del harapo
    se retuerce en la calle...
    Tristeza.
    Me llega muy hondo
    el gris del paisaje.

    ...