• ¿Por qué, el aire surcando,
    dilatándose del bronce los sonidos;
    y sin cesar vibrando
    llegan a mis oídos
    profundos y tristísimos gemidos?

    ¿Por qué de muerte el canto
    en torno de ese féretro resuena?
    ¿Por qué el fúnebre llanto?
    ¿Por qué la amarga pena,
    los cirios, y el clamor que el aire llena?

    Te miro ante mis ojos
    postrado sin...