• Si tu alma pura es un broche
    que para abrirse a la vida
    quiere la calma adormecida
    de las sombras de la noche;

    Si buscas como un abrigo
    lo más tranquilo y espeso,
    para que tu alma y tu beso
    se encuentren sólo conmigo;

    Y si temiendo en tus huellas
    testigos de tus amores,
    no quieres ver más que flores,
    más que montañas y...

  • Pues, señor, dije yo, ya que es preciso
    puesto que asi lo han dicho en el programa,
    que rompa ya la bendecida prosa
    que preparado para el caso había,
    y que escriba en vez de ella alguna cosa
    asi, que parezca poesía,
    pongámonos al punto,
    ya que es forzoso y necesario, en obra,
    sin preocuparnos mucho del asunto,
    porque al fin el asunto es lo...

  • I

    ¡Pues bien!, yo necesito
    decirte que te adoro,
    decirte que te quiero
    con todo el corazón;
    que es mucho lo que sufro,
    que es mucho lo que lloro,
    que ya no puedo tanto,
    y al grito que te imploro
    te imploro y te hablo en nombre
    de mi última ilusión.

    II

    Yo quiero que tú sepas
    que ya hace muchos días
    estoy...

  • Oda

    De los tres cielos que recorre el hombre
    de la existencia en la medida impía,
    cuando la gloria me enseñó tu nombre
    yo estaba en el primero todavía.
    La pena que del pecho
    hasta el abismo lóbrego desciende,
    y del cadáver de un amor deshecho
    finge flotando en derredor del lecho
    la aparición bellísima de un duende;
    la sombra a cuyo peso...

  • -¿Por qué te miro así tan abatida,
    pobre flor?
    ¿En dónde están las galas de tu vida
    y el color?
    Díme, ¿por qué tan triste te consumes,
    dulce bien?
    ¿Quién?, ¡el delirio devorante y loco
    de un amor,
    que me fue consumiendo poco a poco
    de dolor!
    Porque amando con toda la ternura
    de la fe
    a mí no quiso amarme la criatura
    ...

  • Porque eres buena, inocente
    como un sueño de doncella,
    porque eres cándida y bella
    como un nectario naciente.

    Porque en tus ojos asoma
    con un dulcísimo encanto,
    todo lo hermoso y lo santo
    del alma de una paloma.

    Porque eres toda una esencia
    de castidad y consuelo,
    porque tu alma es todo un cielo
    de ternura y de inocencia....

  • ¡Sin lágrimas, sin quejas,
    sin decirlas adiós, sin un sollozo!
    cumplamos hasta lo último. . . la suerte
    nos trajo aquí con el objeto mismo,
    los dos venimos a enterrar el alma
    bajo la losa del escepticismo.
    Sin lágrimas... las lágrimas no pueden
    devolver a un cadáver la existencia;
    que caigan nuestras flores y que rueden,
    pero al rodar,...

  • A Ch....

    ¿Quieres oir un sueño?...
    Pues anoche
    ví la brisa fugaz de la espesura
    que al rozar con el broche
    de un lirio que se alzaba en la pradera
    grabó sobre él un "beso",
    perdiéndose después rauda y ligera
    de la enramada entre el follaje espeso.
    Este es mi sueño todo,
    y si entenderlo quieres, niña bella,
    une tus...

  • ¡Entrad!... en mi aposento
    donde sólo se ven sombras,
    está una mujer muriendo
    entre insufribles congojas...
    Y a su cabecera tristes
    dos niñas bellas que lloran,
    y que entrelazan sus manos
    y que gimen y sollozan.
    Y la infeliz ya no mira
    ni tiene aliento en la boca,
    y cuando habla sólo dice
    con voz hueca y espantosa:
    "¡Yo...

  • Era muy niña María,
    todavía,
    cuando me dijo una vez:
    -Oye, ¿por qué se sonríen
    las flores tan dulcemente,
    cuando las besa el ambiente
    sobre su aromada tez?
    -Ya lo sabrás mas delante
    niña amante,
    le contesté yo, y una mañana,
    la niña pura y hermosa,
    al entreabrir una rosa
    me dijo: ¡Ya sé por qué es!

    Y la graciosa...