Hallándose cortejando

cierto fraile a una monjita,

mientras que la requebraba

le enseñaba su pi...

su pipa con que fumaba.

La monja, como era lega

y profesaba al otoño,

radiaba por darle entrada

y le enseñaba su co...

su copo...

Yéndose a confesar cierta criada,

muy joven, inocente y agraciada,

con un fraile jerónimo extremeño,

más bravío que toro navarreño,

le sucedió un percance vergonzoso

digno de ser sabido por chistoso.

Hizo su confesión la tal sirviente

como la hace...