• La más bella niña
    de nuestro lugar,
    hoy viuda y sola
    y ayer por casar,
    viendo que sus ojos
    a la guerra van,
    a su madre dice
    que escucha su mal:
    Dexadme llorar,
    orillas del mar.

    Pues me distes, madre,
    en tan tierna edad
    tan corto el placer,
    tan largo el penar,
    y me cautivastes
    de quien hoy...