• Nadie es autor de este poema mío, Wladimiro Mayakovski

    El sol ha aterrizado más allá de los trigales dorados,
    enviando a las montañas atestadas de altos vellones
    una mirada sensual que se resuelve en el rubor del crepúsculo.
    Abandonando la ciudad amorfa, hacia la choza cordial
    Marchan los campesinos, entonando canciones sencillas.
    Mujeres de rostro...