"¡Oh! ¡La copa de oro está rota!

¡El espíritu ha huido para siempre!

¡Que suenen las campanas! Un alma

santa flota sobre el río Estigia,

y tú, Guy de Vere, ¿no tienes lágrimas?.

¡Llora ahora, o nunca más!

¡Mira! Encima de ésta rígida y lúgubre

...