• Hay un cisne que muere cercado en un palacio.
    Un cisne misterioso de ropaje de seda
    que en vez de deslizarse en la corriente leda
    se estanca fatigado de mirar el espacio.

    El cisne es un enfermo que adora al dios de oro;
    el sol, padre de razas, fecunda su agonía.
    por eso su tristeza es una sinfonía
    de flores que se entreabren en las sombras del lloro...