• MÁS negros que la noche de mis penas;
    Más bellos que el amor y la poesía;
    Más ardientes que el sol que fecundiza
            Tu hermosa Andalucía.
    Fueran mortales, cual saeta aguda,
            Si Dios, con sabio celo,
    No los hubiera puesto en tu semblante
            Para mirar al cielo.