• LA noche envuelve con pavor que aterra
    Al pobre mundo, que de horror se asombra,
    Y en piélago de luz vaga la tierra
    Envuelta solo con su propia sombra.
    Así yo: los pesares y la suerte
    Envuelven mi razón en negro abismo;
    Para el éter y el sér, no hay sombra ó muerte,
    Mi dolor es la sombra de mí mismo.