• Marchan ante mí, estos Ojos llenos de luces,
    Que un Ángel sapientísimo sin duda ha imantado;
    Avanzan, esos divinos hermanos que son mis hermanos,
    Sacudiendo ante mis ojos sus fuegos diamantinos.

    Salvándome de toda trampa y de todo pecado grave,
    Conducen mis pasos por la ruta de lo Bello;
    Son mis servidores y yo soy su esclavo;
    Todo mi ser obedece a...