• Para Carmen Rosa

    Fundiendo el oro
    de tu belleza con el tesoro
    de mi tristeza,
    fabricaré yo un cáliz de áurea realeza
    en donde, juntos, exprimiremos
    el ustorio racimo de los dolores,
    en donde, juntos, abrevaremos
    nuestros amores...
    Será una copa sacra. Labios humanos
    no mojarán en ella;
    decorarán sus bordes lirios gemelos...