• En lo interior del África buscaba
    un joven viajero
    cierto pueblo en que a todos se hospedaba
    sin que diesen dinero;
    y con esta noticia que tenía
    se dejó atrás un día
    su equipaje y criado,
    y, yendo apresurado,
    sediento y caluroso,
    llegó a un bosque frondoso
    de palmas, cuyas sendas mal holladas
    sus pasos condujeron
    al pie...