• Bajo la madreselva que en la reja
    filtró su encaje de verdor maduro,
    me perturbaba en el claroscuro
    de la ilusión, en la glorieta añeja...

    Cristalizaba un pájaro su queja...
    Y entre el húmedo incienso de sulfuro
    la luna de ámbar destacó al bromuro
    el caserío de rosada teja...

    ¡Oh, Sumo Genio de las cosas! Todo
    tenía un canto, una sonrisa...